Ano 08 nº 038/2020 – Un sueño a 10 horas de mi

                                                                                                             Por: Nathalia Sarasol Neufeld

“Bracol abre suas inscrições!” e esta fue la frase que cambió mi vida.

     Siempre soñé en viajar por el mundo y conocer muchas culturas, pero no pensaba que lograría hacerlo tan temprano y a través de la universidad.

     Todo empieza en un verano 20 de octubre de 2019, cuando una compañera de clase me habla sobre un programa llamado “Bracol” intercambio Brasil x Colômbia , y esto me abrió la mente para la oportunidad de hacer un intercambio, pero no fue tan sencillo así.

     Empecé a leer los documentos y me deparo com la palabra “Intermediário”, sí, había que tener un español intermediário, ahí me quedé pensando en desistir. Y como dicen las personas, los amigos de verdad nunca te dejan desistir y fue lo que ocurrió conmigo, ellos me apoyaran, me incentivaron a escribirme y hacer la prueba y cierto estaban ellos pues acá estoy.?Y mi mamá qué dije? Como la mayoría de las madres se quedó como nerviosa y dijo: “Es muy peligroso!”, ella llevó un tiempo para acostumbrarse con la idea, pero mismo sin querer me apoyó siempre todo el tiempo.

     ?Y ahora? tendría yo otro problema, la plata, como haria para conseguir la plata suficiente para pagar los boletos y el seguro, fue ahí que mis amigos tuvieron la idea de hacer una rifa, que fue fundamental para pagar parte de todos mis gastos para llegar hasta Colômbia, y les digo que sin ellos no tendría conseguido.

     Pero pensaba yo que mi mayor reto iba ser pasar en la prueba y juntar la plata , pero hoy sé que estaba totalmente equivocada, pues mi mayor reto fue salir de mi país, yo una chica de 20 años de una pequeña ciudad en la zona rural de Aceguá, que jamás tendría volado y no sabia ni como llegar hasta el salón de embarque, pero embarqué en este sueño con un viaje de más de diez horas sí, este día fue el día más tenso de mi vida.

     Siempre soñé en viajar por el mundo y conocer muchas culturas, pero no pensaba que lograría hacerlo tan temprano y a través de la universidad.

   Todo empieza en un verano 20 de octubre de 2019, cuando una compañera de clase me habla sobre un programa llamado “Bracol” intercambio Brasil x Colômbia , y esto me abrió la mente para la oportunidad de hacer un intercambio, pero no fue tan sencillo así.

     Empecé a leer los documentos y me deparo com la palabra “Intermediário”, sí, había que tener un español intermediário, ahí me quedé pensando en desistir. Y como dicen las personas, los amigos de verdad nunca te dejan desistir y fue lo que ocurrió conmigo, ellos me apoyaran, me incentivaron a escribirme y hacer la prueba y cierto estaban ellos pues acá estoy.?Y mi mamá qué dije? Como la mayoría de las madres se quedó como nerviosa y dijo: “Es muy peligroso!”, ella llevó un tiempo para acostumbrarse con la idea, pero mismo sin querer me apoyó siempre todo el tiempo.

    ?Y ahora? tendría yo otro problema, la plata, como haria para conseguir la plata suficiente para pagar los boletos y el seguro, fue ahí que mis amigos tuvieron la idea de hacer una rifa, que fue fundamental para pagar parte de todos mis gastos para llegar hasta Colômbia, y les digo que sin ellos no tendría conseguido.

     En un 2 de febrero de 2020 llegaba yo a Colômbia, muy nerviosa, tensa y sin saber que hacer, pero también muy esperanzada con todo que estaba por venir.

Primera semana, la tan esperada semana de inducción, está fue la semana donde empezamos a conocernos, nosotros 26 intercambistas de los más diversos países con culturas tan distintas.

     Conocer a Bogotá fue increíble, subir a Montserrat fue re difícil pero llegar arriba y mirar aquel paisaje linda fue renovador, yo estaba viviendo una gran experiência. Mirar a Bogotá en bici y ver toda la história que hace de esta ciudad un ciudad con grandes memórias fue muy enriquecedor.

     Lo más chévere en esta semana es que fue una semana de “troca cultural”, donde tú mirabas un brasileño hablando una expresión de su cultura en portugués y un mexicano hablando otra en español y así intercambiamos costumbres palabras y expresiones y eso fue muy lindo.

     Segunda semana, la semana en que todo empezó de verdad. Llegamos a Fusagasugá ciudad de nombre tan complejo que llevé un més para aprender a hablar. Primer día

de clase, no voy a mentir, en realidad el primer día fue terrible para mí, todos me miraban como rara, y un profe me hizo sentir mal, bueno, pero esto ya pasó.

     En la tercera semana las cosas ya estaban mejores, ya no miraban tanto, y algunos empezaran a hablar conmigo, preguntar de mi país y de mi cultura. En esta semana me anoté en un semillero llamado PESAPE para empezar a escribir un artículo, y también empezamos a impartir las clases de portuguès donde teníamos como 22 alumnos, y llegamos a impartir 2 clases presenciales.

    En la cuarta semana ya estaba más acostumbrada con la cultura, solo las clases que aún estaban re difíciles para mí, pero estas se quedaron difíciles hasta hoy, y si las clases presenciales ja estaban difíciles las virtuales se quedarán peor por cuestiones de conexión y etc…

     En las siguientes semanas que tuvimos, empezamos a salir un poco más, fuimos a un río con los demás intercambistas, y al Parque Nacional San Rafael que fue una experência muy increíble para mí.

     Y ahora viene la parte que yo nunca imaginé que pasaría, la triste parte de este intercambio, la cuarentena, no hablaré que recibir esta noticia no me entristeció, por que en realidad me quedé muy triste, pero sé que y comprendo la importancia de esta cuarentena. La primera semana en cuarentena yo estaba bien, y tenía la esperança de que pasaría pronto, pero ahora las cosas cambiaran, y sé que me quedaré mayor parte del intercambio acá en el hogar.

     De todo que pase los últimos días puedo decir que, todo que hice yo fue jugar cartas, dormir, comer y estudiar, puesto que me faltan ganas para hacer otras cosas. Otro cambio muy triste que tuve en este tiempo de cuarentena, fue la partida de la compañera y amiga Sonia de México, con quien hablaba mucho y practicaba mi español, es que ahora no tengo practicado mucho, ya que los otros compañeros del hogar viven en una casa al lado y no hablamos mucho.

     Ahora tendré otro reto, que son impartir clases virtuales, creo va ser desafiador, pero puede ser que sea algo bueno, puesto que no hay más nada que hacer a no ser estudiar y impartir clases.

     Los últimos días me hicieron pensar mucho, me trajeron muchas ganas de volver a mí país, no se ,es que no era lo quería para mi, ni algo que imaginaba que iba pasar, quedarme en casa sin poder salir y conocer la cultura. Ahora solo espero que todo pase, y tan pronto pueda volver a aprovechar, experimentar y conocer la rica cultura de este hermoso país, para que al final mis recuerdos sean de una linda historia .

   A pesar de todo que está pasando, aún tuve buenos momentos y ricas experiências con este intercambio y además agradezco mucho a mi universidad Unipampa y a la Universidad de Cundinamarca por la oportunidad que tuve, realizar mi sueño de viajar a otro país y conocer una nueva cultura. Espero que las cosas mejoren mismo sabendo que llevará tiempo.